El estanque

Situado a la salida del pueblo, al lado de la carretera de Benavides.

La laguna de Villadangos o «estanque» como se le conoce popularmente tiene una extensión aproximada de unas diez hectáreas y sus orígenes se remontan a una laguna endorreica, es decir, una zona que se encharcaba en las épocas invernales, llegando prácticamente a desecarse en el periodo estival.

A principios de siglo, los habitantes de Villadangos se dan cuenta del posible uso agrícola de las aguas allí estancadas y construyen unos pequeños muros que embalsan una cantidad de agua con la que pueden regar los campos que se denominan «el riego».

El estanque era cuidado con gran esmero por los Villadangueses, limpiando y cuidando sus muros, ya que gran parte de sus vidas dependía de esta laguna. Con la llegada del canal a Villadangos, se perdió el uso para el que se había construido y el interés fue en disminución hasta el total abandono en la década de los ochenta.

En la actualidad la laguna de Villadangos del Páramo, constituye una de las zonas húmedas de León más valiosas, con una riqueza biológica y paisajística extraordinaria.